viernes, 11 de septiembre de 2015

60) AVILA: LA MEJOR META...~

 Ya sea, para uno de tus viajes de ocio, sin olvidar, que también lo puede ser para  afianzar tu imagen de cara a tus competidores en cualquier propósito de tu vida; pues la localización  geografica de esta pequeña, pero coqueta ciudad amurallada, bien que requiere un gran esfuerzo para llegar a conquistarla.

 Y si no que se lo pregunten a cualquiera de los corredores ciclistas que han asediado con su pedaleo la ciudad empedrada esta mañana, procedentes de Medina del Campo, que les despidió de buena mañana, con el Castillo de la Mota como testigo de la gesta de estos abnegados servidores del pedaleo sobre modernas monturas ligeras, que nada tienen que ver con aquellas bicicletas de hierro, que pululaban como medio de transporte familiar para acudir al trabajo o los mandaos de aquella época por los caminos y calles de tierra, antes que el asfalto se convirtiera en la superficie sobre la que conquistar nuestros deseos de aventura.
 No contentos con asediar Ávila por el Norte, esta tarde los sufridos ciclistas han rendido pleitesía en El Barraco, el pueblo de un grande del ciclismo, por el Chava Jiménez, un joven ciclista que alcanzó la gloria sobre su sencilla montura, pero que el destino le hizo descabalgar de su estamento bien merecido cuando nadie lo esperaba. De él siempre me acuerdo cuando paso por su pueblo en mi camión en busca de las tierras andaluzas.
Hoy desde el Cielo, se habrá sentido bien orgulloso de estos competidores del pedaleo sobre el asfalto, que una vez que echan pie a tierra, son amigos y solidarios entre ellos, aunque no compartan filas en las distintas escuadras ciclistas. El "Chava" bien que les habrá empujado desde su "gloria" para ayudarles a afrontar la cota de la Panamera, el mejor baluarte para empezar a descender y poder conquistar desde suroeste la ciudad abulense, ayudados por la carrerilla del descenso que les impulsará para tomar las murallas con aliento.
Pues no sólo la fortificación centenaria presume de su impronta pétrea de tiempos de los romanos, sino que también las calles aledañas al monumento, declarado Bien de Interés Cultural de la Humanidad, están adoquinadas, por lo que el pedaleo de estos guerreros modernos se tiene que haber visto ralentizado; sin olvidar,mencionar a sus partes nobles, que habrán sufrido lo suyo, por el traqueteo incómodo del paso de rueda entre los distintos huecos de las piezas adoquinadas. Elementos de la construcción, que han convertido su paso en pos del triunfo, en un mar de sonidos único, por inigualable e inimitable, por la tendencia de su pedaleo constante hasta la ansiada  meta.
¿ Que sensaciones tienen que haber sentido o experimentado estos hombres al verse amparados y observados  por las robustas murallas? Espectadoras de lujo, de la llegada de la ronda ciclista hispana, que bien promulga el turismo por las distintas regiones, provincias y localidades de nuestra España; sin olvidar las pedanías por donde circula esta serpiente multicolor. Con sus imágenes tomadas por acrobáticos operadores de cámara, confiados a la maestría en el manejo de las riendas moteras por palafreneros ataviados de trajes de cuero, y protegidos por cascos, que nada tienen que ver a  las armaduras de los distintos caballeros guerreros que dejaron su impronta en los anales de las asedios históricos a esta bella ciudad regada por el río Adaja.
 ¿Que deben sentir los pilotos y operadores gráficos aéreos al sobrevolar esta sencilla ciudad, y contemplar a vista de pájaro mecánico, el reflejo dorado que desprenden  las piedras conformadoras de un Monumento único en el mundo, por estar rondadas por el ocaso del día por el Oeste; la mejor hora para tomar una foto desde los Cuatro Postes, lugar muy frecuentado por Santa Teresa, cuyo Quinientos Aniversario de su nacimiento celebra la Capital de la Moraña, en consonancia con Alba de Tormes, lugar donde falleció.
   Mostrando al público, ambas ciudades, durante todo el año, variados espectáculos de teatro, música y  exposiciones de arte, que bien resumen la vida y obras de una abulense, cuyo nombre me ha amparado desde mi nacimiento y casamiento, por ser Maria Teresa, el nombre de la madre que bien me parió, y que observó como aprendí a pedalear en una BH anaranjada, allá por los años 80; y el de la esposa, que desde hace quince años,  espera  la vuelta de mis viajes camioneros, sin olvidar, que   soporta y  permite mis ausencias domingueras para disfrutar de la pasión que siento por la bicicleta.
  Pasión que ha echo que hoy, haya experimentado una emoción al ser espectador televisivo desde la cabina de mi camión, de la llegada de la Vuelta Ciclista a Avila, una ciudad que a albergado en numerosas ocasiones este evento, y de las que destaco, una llegada cuando yo era niño, y que puede presenciar en directo, al ser llevado allí, junto a mis compañeros de estudios como excursión de final de curso.
 Muchos años han pasado desde aquella llegada de los  Perico, Lejarreta, Indurain,  a Avila, y más de veinte años después, con Valverde, Purito, y Quintana...siguen despertando el mismo interés en el respetable, porque Avila bien que es la culminación ideal de una etapa de la Vuelta Ciclista a España...
Sin olvidar, que también puede ser un alto en tu camino, o destino ideal para rememorar bellas imágenes y experiencias, que sólo se pueden protagonizar por sus calles..que te retornarán a tiempos muy lejanos... pero sin abandonar la modernidad, que por su virtualidad, ha propiciado que te lleguen estas líneas nostálgicas de un camionero aficionado a la bicicleta...Que no es tan regular en su práctica, pero  que admira a cualquiera de estos deportistas, que bien merecían tener el mismo estatus que los jugadores de fútbol...Quienes nunca llegarán al umbral del esfuerzo soportado por estos hombres tras kilómetros de pedaleo, que bien que hacen mella en su rictus tras el cruce de la línea que les permiten echar sus pies a tierra, pero aún así, su desgaste diario no es impedimento para esbozar la mejor de las sonrisas, y para muestra, no un botón, sino  el  "Purito", el ciclista catalán que en la meta abulense no ha dudado en dejar impronta de su simpatía y ganas de broma con el periodista que lo entrevistaba.

 ¡Será por el bienestar que aporta AVILA a su recién llegado visitante... sea en coche, moto, autobús, caminando, y sin olvidar a la bicicleta, la protagonista de este relato..!


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