domingo, 30 de agosto de 2015

50) EL PICO BLANCO: UN LUGAR IDÍLICO

 Cualquier persona bien sabe a donde dirigir sus pasos para encontrarse consigo mismo. Cualquier lugar puede ser el ideal para según que estado de ánimo en el que se encuentre su asiduo o esporádico visitante.
La Pesga (Cáceres) y su entorno natural
 En mi caso, yo tengo uno en cada puerto, lugar que no amor. Pues por mi trabajo puedo estar asiduamente en diversos destinos cada semana, lo que permite tener seleccionados ciertos rincones, sea en baluarte como a pata llana(que dice algún conocido mío, por poder llegar hasta ese lugar sin tener que superar escalones o desniveles) donde poder disfrutar de ese momento en el que unas vistas o la tranquilidad regente, me hacen sentir dueño y señor del momento.
 El "Pico Blanco" es el punto más alto desde donde se puede contemplar La Pesga ( Cáceres) y el Pantano de Gabriel y Galán, con sus recules diversos que buscan  en la base de las prominentes sierras el agua procedente de las lluvias, que bien que se concentran en este lugar en la época otoñal. Algunas veces las tormentas se caracterizan por una abundante  precipitación, que a mis allegados les comento en tono jocoso que La Pesga por su entorno geográfico parece la base de un "orinal".
Vista panorámica Embalse Gabriel y Galán
 Poder otear el horizonte desde los aproximados 800 mts sobre el nivel del mar es un privilegio al alcance de quien intenta llegar hasta este vértice geodésico, ya sea en todoterreno, quad, btt o en el mejor medio de transporte que existe: el coche de san Fernando, un ratito a pie y otro caminando.

Este "medio" común para todo ser humano es el más recomendable, y el que yo prefiero para llegar a este baluarte natural de la Comarca de Trasierras de Granadilla, cercana a la coqueta ciudad extremeña de Plasencia.
 El inicio de esta ruta a pie es complicada para quien no esté acostumbrado a pasear con asiduidad, pues el desnivel inicial desmoraliza desde la misma carretera comarcal que cruza La Pesga buscando Mohedas de Granadilla o el Cruce de Mesa Santa con la carretera que une Salamanca con las Hurdes, famosa comarca de la Extremadura más histórica, muy recurridas por distintos artistas en variados estilos, ya sean del cine, televisión, literatura, pintura... etc.
 Esta ruta senderista marcada con el n°10 en hitos de madera perfectamente localizados por la mirada del senderista, por estar coronados por una pintura azul intenso, así como flechas del mismo color bien plasmadas sobre ciertas piedras de pizarra, que por su situación en cruces y veredas, ayudan al caminante en su ansiado objetivo de llegar a la cumbre.
 A lo largo del recorrido, por pistas o caminos agrícolas de buen piso, aunque debo mencionar que abundan,  pequeñas piedrecillas sueltas, al ser la base principal de su construcción la zahorra para que estas pistas puedan aguantar el envite de las distintas maquinarias, sea tractores con neumáticos o de cadenas, así como los todoterrenos, y ciertos camiones de pequeño tonelaje que abastecen de materiales de construcción para levantar casetas agrícolas y casas de asueto vacacional o de fin de semana.
Miguel, joven colmenero pesgano ante
distintos utensilios empleados en
la recolección de miel
Sin olvidar los camiones de los colmeneros, por ser este entorno y sus pueblos unos buenos productores de miel, cuyas obreras aladas, por las abejas, bien cuentan en privilegiados promontorios, con sus factorías en madera, por las colmenas, donde asisten y protegen a su reina, produciendo este dulce reconstituyente para el recuperar o evitar el resfriado.
 A medida que el peregrino busca la cumbre, pues esta ruta en algunos tramos, sobre todo los dos últimos kilómetros hacen pensar al caminante que está pagando su particular penitencia, por su falta de previsión o exceso de confianza al creerse que el día agosteño era fresco por ver oscilar los adornos y banderolas que engalanan las calles pesganas por ser las Fiestas de la aceituna, ya que este fruto es el que ampara la economía de muchas familias de este entorno extremeño.
La recolección de la aceituna, y su posterior conversión
en aceite conforman el medio de vida de muchas familias
Menos mal que la riqueza natural con el que cuenta este coqueto pueblo extremeño, cuenta con distintos árboles frutales que bien avituallan al senderista cuando empieza a obsesionarse con el deseo de beber agua.
Algunas sombras aportan el mejor oasis para el ascenso
en tiempo veraniego
Unas brevas, moras, melocotones y manzanas bien pueden aportar ese aporte de glucosa necesario para coronar el Pico Blanco, o bien para que ayuden en el descenso para completar la consecución de un sueño, deseo o reto deportivo o de pasatiempo.
 No se preocupe si decide completar esta ruta por los meses de Mayo o Junio, que bien puede avituallarse con unas cerezas, que sin ser del Valle del Jerte, no tienen que envidiarlas por no gozar de tal distinción denominadora de origen. También se dan muy bien las ciruelas, granadas...en fin que cualquier pintor que se precie, bien podía reflejar un bodegón pesgano de frutas para la posteridad.
Las ferias de muestras bien acercan
al público las viandas más suculentas
que hacen que el visitante
se sienta colmado de atención
y cariño que aporta
las gentes sencillas
de Extremadura
 Una vez que el deportista, senderista, aventurero hace cumbre, el cansancio por el esfuerzo se aletarga, para dejar que las sensaciones agradables de sentirse privilegiado por disfrutar de un bienestar indescriptible, por poder contemplar unas panorámicas a vista de águila, pero sin desplegar alas, ni las patas del suelo.
La Pesga, y su entorno desde
El Pico Blanco
 Una vez que el estrés semanal se disipó en las alturas, el peatón rural desciende hacia el reencuentro  de la vida en el pueblo, pero sin perder de su perspectiva al Pico Blanco, esa atalaya natural desde la que cualquiera se puede sentir un privilegiado, por señor o señora de su momento....
Distintos dulces típicos
con los que el visitante o convidado
es agasajado en celebraciones privadas
 y eventos públicos.
Disponibles para su venta
en tiendas, ferias y supermercados
Por contemplar sus dominios, que sin ser feudales, le han sido otorgados por ser nacido o pacido, cuando no recompensado por casamiento con una moza o mozo criado en este privilegiado entorno situado, no lo olvide en La Pesga (Cáceres) en Extremadura, una región que aunque su nombre diga que es extrema y dura, sea por su calor estival, como el frío invernal, no deja de aportar calidez espiritual a quien se acerque o llegue, sea en coche, moto, autobús o en el mejor medio de transporte... el de san Fernando, el mismo que te permite conocer a la gente sencilla y de noble corazón, que bien te tratará ya sea  al pie de una buena mesa bajo el cobijo de su morada, o las faldas del Pico Blanco al raso, con unas buenas migas extremeñas en el almuerzo o una caldereta de cordero o cerdo en la cena.
El Pico Blanco, tras el descenso
 En definitiva que por La Pesga y su entorno caminarás, te avituallarás de forma natural si la necesidad aprieta, y para colmar tus aspiraciones podrás degustar distintas viandas y postres caseros que bien te harán rechuparte hasta los mismos dedos, para recuperar fuerzas y la ilusión por retornar a este bello pueblo y ascender a su Pico Blanco, el mejor lugar para soñar despierto..

49)LA BUENA ESCRITURA.. BIEN SE CATA

 El lector disfruta con su lectura, hasta tal punto que después de 1000 páginas leídas de las 1139 que se compone el libro, siente que le queda poco para terminar una aventura, que se le presuponía larga.
 La proeza del autor es conseguir que el lector sienta tristeza cuando presupone el fin de la lectura de su obra, a pesar de querer conocer el desenlace de los destinos de cada uno de los diversos personajes que les tenga preparado la imaginación del escritor, justo juez, amparado por su arduo trabajo.
 Ya voy terminando "La ley de los Justos" de Chufo Llorens, y lo estoy haciendo a pequeños sorbos, como si fuera un sumiller encaprichado con una botella de un caldo  que acaba de llegar de una bodega de reciente proyección....
Y de la que no quiere dar el último sorbo, aún a sabiendas que la "bodega" le tiene reservados más "volúmenes" esperando su cata...algunas veces a ciegas.
 Desde que dejé el instituto nunca más volví a leer, hasta que se cruzó en mi caminar vital una guapa mujer, entreverá con sangre extremeña y charra para más señas, quien me regaló un libro en la Navidad del año 2001 , un año después de empezar a caminar juntos por estos mundos de Dios, la novela "La sombra del viento" de Carlos Ruiz Zafon. Despertó en este zote, de nuevo la pasión por la lectura, que hoy 15 años después continúa y de qué manera...
Gracias cariño por este libro y por aquel, regalos tuyos que han echo que nuestra separación forzosa temporal por ser camionero, sea más llevadera con tantos libros escanciados y catados de las distintas bibliotecas y librerías, que no bodegas, que han conseguido que me embriague de cultura, la misma que tanto educa a quien bien se acerca a ella.
Quizá cualquier libro sea como una botella de vino, ésa que te puede abrir un nueva pasión, aún cuando no te guste "beber" ... ¡que diga leer.....!

Nota: antes no leía, ahora me apasiona
           tampoco me gustaba el vino,
           en la actualidad, de vez en cuando,
           en la mejor de las compañías
           una copa bien entra....
          Eso sí, siempre que esté libre de
          mi gran pasión...la conducción
48) ESTADO DE REVISTA VARONIL ~

 Ayer mientras disfrutaba de una agradable velada en el bar viendo el partido del Real Madrid con mi ahijado, llamó mi atención el look de algunos jugadores del equipo blanco, por desaliñado; es decir, que por sus barbas(que dirían nuestros mayores) descuidadas daban la sensación de unos guarros (palabra utilizada por nuestras madres, abuelas para intentar convencer al hijo o nieto de la necesidad de un afeitao).
   Claro, bien sabemos todos, que aquella época en la que afeitarse era símbolo de limpieza y buena presencia del varón, y sobre todo desde que el mozo cumplía con su servicio militar, el estado de revista tenía como condición indispensable un buen rasurao, ya fuese con brocha, maquinilla o máquina eléctrica, sin olvidar la lustrosidad en su calzado, el del Domingo y el de la instrucción castrense.
 A medida que la vida ha ido evolucionando, cada vez tengo más claro que a peor en alguna faceta de nuestra existencia, ciertos parámetros de presencia varonil "typical Spanish"  han ido desapareciendo, cuando no quedando denostados, sea por influencia del marketing de ciertas marcas dominantes del mercado de la moda, como de la expansión, vía boca a boca, de looks importados de terceros países.
 Soy partidario de que cada cual mantenga su look, ese que cree apropiado, sea aconsejado por señora, señorita o niña; o por ser con el que más guapo se vea.
 Pero lo que me jode sobremanera que el marketing me quiera hacer comulgar con ruedas de molino, haciéndome entender que si uso sus productos tendré un cutis tan fino como el de unos jugadores casi "in barbes" por su joven edad o con barbas no frondosas, por muy mucho que les "creamos" mayores por ser "estrellas" del firmamento ficticio que bien crea el "dios fútbol".
 Y encima si a eso se le añade, que en el partido en directo aparecen con un look enbarbado como seña de identidad, mientras que en los anuncios en el descanso aparecen con una presencia, que hasta el General Jefe del Estado de la Defensa les daría con un beso el pase de revista.... uno se siente ultrajado en sus costumbres y tradiciones promulgados por unos hombres bien curtidos en aquello del buen afeitado y colonial masaje antes de salir de casa en  pos de su trabajo, ya fuese industrial, ganadero, agrícola, construcción y sin olvidar al administrativo, ni al maestro.
 ¡Cómo les escocian o jodían aquellas palmaditas encoloniadas en sus rostros, pero que "hombría" despertaba en el niño que tras años observabando en sus mayores aquella costumbre, al imitarlos y poniedo en práctica sus mismos gestos se sentía un hombre hecho y  derecho, sin tener ni cuatro pelos en su angelical rostro...!

jueves, 27 de agosto de 2015

47) ENTRE COFIAS Y MANDILES ~

  En estos tiempos que nos soportan, y en los que la corbata, parece que ya no es un símbolo de señorío, debido a la moda que están imponiendo los nuevos políticos de arcunia universitaria.
Siempre podemos ser invitados a un evento, en el que la tradición o protocolo de la servidumbre hostelera, te haga sentir cual señorito, por un momento, un rato o parte de un día. 

  Hace
unos días, quien escribe, se engalanó con su traje, y corbata para la ocasión, por figurar entre los invitados a un evento nupcial celebrado en Madrid. Una vez que los respectivos padrinos firmaron el contrato de entrega (a poder ser de por vida) de sus hijos, los invitados fuimos agasajados con una suculenta cena, en un salón sencillamente decorado;
 no sin antes, haber disfrutado de un cocktail en el entorno ajardinado, y amenizado por un coro rociero, que bien nos arropó con sus melodías, para que el aposentamiento de los distintas viandas en el cuerpo serrano de cada cual, resultase más entretenido.
 Disfrutar de aquel lugar, una antigua alquería, que sin estar localizada en Levante, está perfectamente mimetizada en el entorno urbano de Alcorcón(Madrid); me hizo sentir, cual señorito castellano.
El verse servido por camareras, perfectamente uniformadas, incluso tocadas por la cofia, muy común como completo en la uniformidad del personal de servicio de las antiguas casas señoriales de épocas ya pasadas; sin olvidar a los camareros, ataviados con su mandíl largo, bien que nos encapsularon en el regreso al pasado, no tan lejano, por el tiempo que allí permanecimos a la vera de sus bandejas, que bien colmaron las aspiraciones de los comensales más exigentes.
 La Alquería, invitaba, a medida que uno se adentraba por sus senderos empedrados, a dejarse llevar por su vena más romántica, la cual, se dejaba rondar por la decoración de cada una de las estancias de ese lugar, ya fuere por sus espejos, lámparas y distintos elementos decorativos perfectamente localizados en los interiores.
Sin olvidar, el sonido de las fuentes y distintos regatos de agua exteriores que componían el perfecto hilo musical para acompañar cada uno de los pasos conformadores de un paseo aunador de tradiciones y costumbres de una vida ya pasada, en la que lo empleadores y empleados, bien sabían que su apariencia y valía, no dependía de la vestimenta, ni si quiera, de un complemento, como hoy en día, parece ser que es la corbata....
Sino que los señoritos y criados, bien que eran distinguidos y valorados por sus valores personales...fueran o no tocados, por un mandíl, cofia o corbata....porque al final lo que siempre queda para la posteridad, son las acciones de vida, y no los elementos que completan las uniformidades o mejores galas que nos visten....y que algunas personas creen que les dan un estatus, que en realidad no saben demostrar.... pero si aparentar....

miércoles, 26 de agosto de 2015

46) EL MELÓN, EL MEJOR EMBAJADOR ~

  Según cuenta la leyenda, Enrique lV acuñó una frase que rezaba: "París bien vale una misa". Por lo tanto si a quien definen como el mejor Rey francés, le compensó tanto esfuerzo para conseguir sus sueños, como fue convertirse al Catolicismo para poder gobernar, bien que les compensará a las protagonistas principales de esta historia pasar los días con sus noches a pie de carretera en el punto kilométrico 98 de la A-4, en dirección Madrid.
PPuesto Área Turieque. Km 98.A-4
Sentido Madrid.
Atendido por dos hermanas día y noche
El motivo de su "aguardo" cual vendedor avezado, es el retorno por carretera de los súbditos marroquíes que tienen en Francia su segunda patria después de haber disfrutado de sus vacaciones veraniegas en Marruecos.
  Llevaba mucho tiempo intentado reunir material gráfico sobre la venta de melones y otras frutas de la huerta a pie de carretera, pero no ha sido hasta esta pasada noche, cuando he podido tener el privilegio de conocer a dos mujeres, que están todos los días que abarca la campaña o temporada propicia para la venta de los melones, y otras frutas y verduras; convirtiéndose en cuanto son depositados en los maleteros de los turismos de sus compradores en los mejores embajadores de nuestra Patria, y sobre todo de su tierra, pues bien es conocido que los mejores melones se dan en Castilla La Mancha.
Una vez comprados, al carro o maletero
para cubrir el largo viaje 
 Desde que círculo por las carreteras de nuestra España, he podido observar en distintos puntos o estaciones de servicio innumerables puntos de venta de melones, sandías, cebollas, patatas, puerros..etc. Sean bajo toldo, con mostrador de madera y báscula de pesaje incorporada; como también resguardados por la sombra de una  furgoneta, y sin olvidar al tractor y remolque, son muchas las personas que están a pie de cuneta para ganarse las habichuelas.
Señuelo área servicio entrada Jaén.
Sin importarles el bochorno y las elevadas temperaturas estivales   que tengan que soportar esperando a su cliente viajero, ése que ante un "señuelo natural" sabiamente colocado antes de entrar a una vía  de servicio, bien conocen donde comprar un buen melón para compartir tras el disfrute de un buen manjar, sea guisado o asado, pues hemos de reconocer, o por lo menos, así defino yo al melón, como una fruta aunadora de personas, ya sean familiares o amigos.
7 melones por 10€. Cruce Herrerías (Mérida)
Este fruto de la huerta, es degustado en ocasiones especiales, pues de todos es conocido que es el postre más socorrido para disponer de él en la playa, al pie del riachuelo o garganta natural de cabecera para el baño de cada cual; sin olvidar en la mesa del hogar, tras unas buenas viandas elaboradas por nuestras abnegadas madres, abuelas y mujeres que tienen en la sandía y en el melón sus perfectos aliados para satisfacer a sus comensales más queridos, para refrescarlos y enduzarlos, pues estas frutas gozan de tener entre sus propiedades estas dos cualidades.
Puesto Cruce Herrerías. N- 630
 Volviendo a los puntos de venta carreteros, pensaba que la venta era exclusivamente diurna, pero la casualidad en forma de somnolencia, provocó que detuviera mi marcha en el  área de servicio de Turieque, donde unos puestos de venta ambulante me sorprendieron por estar abiertos a la una de la madrugada.
 Movido por la curiosidad de saber que estaban abiertos, me apee de la cabina para acercarme hasta donde se encontraban.
Vendedor durmiendo junto a su remolque.
Área Turieque
Una mujer, bajo de su furgoneta, donde se refugiaba junto a su hermana, del frescor de una noche, que ya hacía ponerse una manga larga, y con amabilidad, me preguntó:
:
  - Que desea usted...?
  - Verá señorita, soy un camionero que le gusta pasar sus tiempos de espera escribiendo sobre lo que le llama la atención en su ruta, y me gustaría tomar unas fotografías para apoyar gráficamente mi relato sobre la venta de melones a pie de carretera.
Variedad de frutas y verduras
en el puesto de las dos hermanas
 - Ella, contrariada porque su futuro cliente, no era más que un camionero, que no comprador, antes de volver a entrar en su furgoneta encogida por el frescor de la noche, me indicó que tomase las que quisiera.
Antes de que volviera al asiento reclinado de su furgoneta, donde continuar con su duermevela particular, pude intercambiar unas pocas palabras para conocer, que ella y su hermana durante la campaña que abarca la recogida del melón y la sandía aguardan al presumible cliente que entre por la gasolinera, desde las 8'00am hasta las 22'00 pm aproximadamente; haciendo de su jornada continúa, es decir, manteniendo su puesto colocado las 24 horas, los días que coincidan con el retorno continuado de los súbditos marroquíes que retornan a los distintos países europeos donde encontraron su particular "dorado".
La " playa " particular de mis dos protagonistas
 El resto de sus jornadas estivales, han de recoger sus piezas hortofrutícolas una a una, para una vez ordenadas en su furgoneta volver a casa a recuperarse de una jornada, la cual, se me antoja dura al saber que han de contemplar el paso de miles de viajeros, sin ni siquiera conocer, cómo será su recaudación al final del día.
 La otra hermana, quien permanecía en el interior de la furgoneta acurrucada al calor de su smartphone, por ser aficionada más que su hermana a la navegación internauta, fue quien me atendió a mi regreso, porque al percatarme que mi cartera quedó en el camión, decidí regresar, para comprar uno de aquellos melones al precio de 1.50€ la unidad.
Para casa, que se vino desde Turieque
 Con una sonrisa preciosa, eligió y me despachó uno de aquellos ejemplares, con el deseo que  me saliera bueno.
 ¡ Que más dará como me salga el fruto, si sus vendedoras, sin saberlo, ayudaron a este camionero a continuar su ruta nocturna, la cual, pude continuar, ya despejado; quizá hilvanando en mi imaginación este pequeño homenaje a los vendedores ambulantes a pie de carretera nacional, autovía o comarcal, si bien se les puede encontrar en cualquier lugar, bajo una sombrilla, pero no en la playa...sino a pie de la gasolinera, restaurante.. donde bien saben, que las familias paran a avituallarse, y quizás compren uno de esos melones, para ser abierto en la celebración de llegada al hogar, sea en una comida o cena, rememorando en  pinceladas los mejores recuerdos de unas vacaciones.
 ¡ Yo recordaré cuando lo cate, la sonrisa y simpatía de las dos mujeres, que bien me lo eligieron y vendieron en la predimitación y alevosía, de una asalto nocturno de un camionero a su descanso...furgonetero..! Un placer señoritas, volveré para averiguar sus nombres, que una bonita historia sin nombrar a sus protagonistas, no es un trabajo acabado para un camionero aficionado a esto de la escritura....

lunes, 24 de agosto de 2015

45) "ERO".. ¿INICIO O TERMINACIÓN  ? ~

Desde mi modesta opinión, una de las leyes gubernamentales más acertadas es la de la Ley antitabaco.
 Por suerte o por desgracia he desempeñado, desempeño y desempeñaré mientras la salud  me lo permita dos profesiones que terminan en "ero" dedicadas al servicio de los demás.
¡Que no es lo mismo que su terminología comenzase por esas tres letras....! Por aquello que algunas mujeres o personas "ambidiestras" sexualmente escribiendo, confiesen que les "ponen" y de que manera, algunos camioneros y bastantes camareros. ¡Que pena no haber nacido guapo...! Para ir en concordancia con mi apropiada altura, como diría mi padre en la adolescencia de su primogénito: <<"de modelo">>.
  De esa manera podría haber sido objeto de deseo, que conste en acta: SOLO DE ELLAS. Para tenerlo todo "de cara" y poder triunfar cual tor"ero" en plaza de tientas, capeas, novilladas y corridas...
 Pero bueno, que he de volver a la "Ley antipitillos encendidos" en lugares de ocio y trabajo cerrados.  Cuando, como camarero, servía en la época de vacas gordas de nuestra economía, todos los fines de semana en distintos restaurantes, tras aparcar y apearme del camión en el centro de Transportes era muy desagradable llegar a casa, después de finiquitar la jornada de servidumbre hostelera, y a la hora de preparar la ducha, tener que malacordarse del tabaco, sea en su variante común, como es el pitillo; y sin olvidar su vertiente más voluminosa, como es el puro o habano al ser el presente más socorrido para obsequiar a los a los "hombres" invitados a un enlace, comunión o bautizo( bien que preguntaba:<<¿aquí está sentado hombre o mujer..?>> quien lo iba depositando al lado del cubierto huérfano de comensal, por estar ausente, en el Wc o de pululeo entre los invitados.
Aquellos cigarrillos y habanos encendidos  dejaban su impronta hasta en la ropa interior de quien en su vida ha dado una calada. Resultaba repugnante rememorar horas después de finiquitar el servicio,  esa fragancia humeante y nociva de un vicio defendido a capa y a espada por sus consumidores empedernidos. No me quiero imaginar, si yo he agradecido la Ley antitabaco, que pensarán aquellos profesionales de la hostelería que han servido copas, comidas y cenas a pie de cenicero toda su vida profesional. Son muchos los camareros que sin ser fumadores desarrollaron enfermedades pulmonares por inhalación de humos emanados de pitillos en boca, cuando no de los mal apagados en el cenicero metálico,de cristal o cerámicos.
 Desde mis intereses presenciales como camionero, recién llegado al lugar de carga o descarga, he agradecido mucho la prohibición de fumar en los restaurantes, porque nuestra profesión lleva implícita la imposibilidad de disponer a diario de una toma de ducha; por lo que la ausencia de humos, bien que nos a venido a más de uno, para poder "acercanos" con sosiego a la garita de seguridad, atendida en algunas ocasiones por personal femenino. ¡Que uno, aún siendo camionero, intenta ser muy coqueto..!
 Gracias a aquella Ley antitabaco, los fumad"eros"  autorizados fueron promulgándose a las puertas de los bares y centros de trabajo; y es en estos últimos, en los que los camioneros, más los hemos agradecido, porque tras horas y horas de espera en la soledad de la cabina para cargar o descargar,  nos viene "de perilla" alegrarnos  el sentido de la vista, auque las maniobras de aproximación al muelle se nos descordinen,  por estar pendiente más del personal femenino que se encuentre en ese momento en el fumad"ero".
¡Que le vamos a hacer, si ciertos "eros" bien definen lugares y profesiones donde conocer al compañer@ de tertulia, confidencias.. y quien sabe, quizás al amor de tu vida....!

sábado, 22 de agosto de 2015

44) LA FIESTA DE LA ACEITUNA

  En estos días en los que el calor veraniego se resiste a abandonar su gobierno, y las aceitunas van coronando el alto del olivo, haciéndole rendir pleitesía a quien por su vera pasea; los pesganos, sean nativos, pacidos arrimaos, sin olvidar a los forasteros, se lo pasan de lo lindo en sus fiestas dedicadas al humilde y socorrido fruto del olivo.
Antes de que medianero Septiembre, con el descenso paulatino de sus temperaturas permita a los olivareros extremeños, acompañados por sus cuadrillas contratadas o familiares "voluntarios" acudir en sus todo terrenos, tractores y furgonetas a vibrar el olivo, acariciar sus ramas, y en último caso varear las aceitunas; las cuales, una vez recogidas con la rede, a mano o máquina son llevadas y clasificadas en las distintas cooperativas agrarias, y a las distintas almazaras, para ser convertidas en el aceite oliva virgen extra.
El aceite de oliva virgen extra se ha convertido de un tiempo a esta parte, en el protagonista indespensable  de la cocina y mesa de restaurantes y hogares particulares, sea para guiso, aderezo; desde el desayuno, en la tostada matutina, pasando por  el guiso de mediodía, y llegar  a la cena, para gobernar la ensalada que nos ayude a ir ligeros de equipaje digestivo a la cama, en busca del reparador descanso.
 En estos días, en los que la palabra "aceituna" preside la cartelería mostrada en los escaparates de bares, panaderías y supermercados de La Pesga y su comarca, y en la digitalizada en las redes sociales, el fruto del olivo es la perfecto obsequio cortesía del hostelero para  acompañar el  vino, cerveza, martini o vermut del mediodía.
No es Sevilla, es La Pesga(Cáceres)
 La Pesga (Cáceres) en estos días se transforma desde que amanece, pues si en un fin de semana normal el sonido de los todoterrenos es el predominante  en pos de coger la pista que le lleve al agricultor extremeño a lo alto de la Sierra, donde se encuentran los distintos bancales en los que se encuentran los olivos, cerezos, manzanos, higueras, melocotoneros..
Sin embargo, estos días de sus Fiestas, la tranquilidad predomina al amanecer de un nuevo día, que bien se presentará largo hasta que la orquesta termine su actuación en la Plaza del Collado, cuya  fuente circular, es fiel testigo de distintas actividades diurnas.
Fuente del Collado. Plaza Principal La Pesga
.Como por ejemplo el disfrute de padres, que acompañan a sus retoños para que no sufran ningún incidente a lo largo del recorrido que completa el tren autopropulsado por el diésel entre las calles más amplias de este bello municipio, en las cuales, bien se puede vislumbrar vestigios de épocas pasadas en las construcciones típicas hurdanas, pues La Pesga no dista muchos kilómetros de el entorno natural de Las Hurdes extremeñas.

También en la Plaza del Collado se ha celebrado un sencillo y concurrido concurso de plantas, donde las mujeres presentan las "joyas" de su particular vivero domiciliario, para intentar llevarse el primer premio, que le distinga entre todas sus paisanas.
Ganadora Concursos de Plantas 2015
Una vez el jurado da su veredicto, los maridos cargan con la planta presentada, para devolverla al lugar privilegiada de su  morada, donde seguirá recibiendo los mimos de la gobernanta, señora o dama.
 Al final del concurso, las bandejas con bizcochos, y jarras repletas de café pululan entre el respetable en manos de abnegadas voluntarias, que bien acompañan a su invitación, con la mejor de las sonrisas, esa que hace sentirse al forastero, como un pesgano más....¡Doy fe....! Gracias señoras por su amabilidad y mejor trato....