martes, 10 de noviembre de 2015

96) DONDE LAS IDEAS, TOMAN FORMA~

 Gracias a mi trabajo conozco y vivo en directo el desempeño de ciertas profesiones dignas de admirar.
 Siendo Viernes, estoy en Dos Hermanas ( Sevilla). El pueblo natal de los  creadores e intérpretes de la famosa canción "La Macarena", y en dónde no sólo las ideas rompen fronteras con la música, sino también con la diversa maquinaria que se diseña, fabrica y monta en empresas, como la de Jesús y Antonio Martinez.

Oficinas y Taller de la empresa Martínez Hermanos.

 Con un viaje de 7 horas por delante para descargar maquinaria diversa que posibilite la competitividad en una cooperativa aceitunera extremeña, provoca que el cuerpo no este para fiestas. Pero sí, agradecido por descubrir a unos hermanos, que dan forma a ideas que surgen de sus inquietudes, que son  convertidas en máquinas en el negocio, que ya ha aportado el pan de cada a dia, a cada uno de los miembros de esta prolífica familia.

Máquina cargadora de aceitunas
cortadas en lonchas. Un creación
de Martinez Hermanos.

 Escribo "prolífica" porque el negocio de la familia Martínez Hermanos, se dedica al diseño y fabricación de elementos mecánicos para la industria conservera. En la actualidad, los hermanos Jesús y Antonio, representan a la tercera generación de estos artesanos de la modernidad.

Detalle cargadora de aceitunas.
Como la noria que regaba nuestras huertas,
La aceituna cortada, es elevada en su líquido
para ser depositada en la cisterna.

 El negocio tiene el relevo garantizado, por ser uno de los hijos de Antonio, el empleado que maneja la carretilla elevadora que asciende a las diferentes "criaturas metálicas" hasta el camión, que las trasladará a su lugar de empleo, que no destino.

Cuando sus creaciones, llegan a su lugar de empleo,
los operarios, las descargan prestos para ser instaladas.

 Anselmo, así se llama este joven de 22 años; quien iba para músico, pero se ha quedado escuchando en el taller de su bisabuelo las notas del soniquete de las distintas herramientas empleadas por los veinte empelados que fabrican esta maquinaria, ya sea el de una radial, como un taladro, sin olvidar el sonido del torno, la plegadora, el chisporroteo del electrodo al soldar el acero inoxidable...

"Perdigonera" o seleccionadora de aceitunas. Creada
por esta familia de creadores de maquinaria.

Y cómo no, el más ancestral, el sonido del martillo al golpear su objetivo metálico. No sólo Antonio ha depositado la semilla de la continuidad en su vástago Anselmo, sino que también su hermano Jesús, ha dejado su impronta de futuro, en su hijo Antonio, quien trabaja en las oficinas de esta empresa andaluza.

La maquinaria diseñada y fabricada por esta familia
y sus empleados, no sólo es mimada en su taller, sino
que también lo es durante su transporte. Para que
no sufran ningún tipo de daño durante el traslado.

  Quien entra en sus instalaciones, si es admirador del trabajo artesanal, no las abandonará, sin haber loado tan magnánimo trabajo de personas, unas jóvenes, otras longevas.
 Entre los empleados he conocido, a Paco, quien lleva la friolera de 40 años con maestro tornero; y ni si quiera fue a la escuela. Este hombre, ha aprendido este noble oficio a base de errar unas veces, y acertar en su trabajo mecánico y de especialista. A medida que me lo narraba, por detrás de él, un compañero orgulloso, asentía ante mi mirada de incredulidad.

El torno, herramienta fundamental
en este tipo de empresas.
 Pero si Paco hizo novillos en la escuela para aprender un oficio, su jefe, por Antonio, no se me va de largo.Me refiero a que este último comenzó sus estudios universitarios, pero como él reconoce, se quedó a medio camino. ¡Dios bendito! A medio camino dice este hombre, si con la maquinaria que él idea y diseña, al compás de sus empelados informáticos que están en la oficina frente al computador; y el trabajo de sus especialistas mecánicos, torneros y electricistas, sin olvidar a los soldadores, merecen menciones y encumbramientos con elogios variados, por diversos.

Elementos metálicos y eléctricos
dan vida a las ideas de esta familia, que
aportan competitividad a las distintas
fábricas de conservas.
  El encargado, Juan José, lleva al amparo de estos dos hermanos, la friolera de 33 años, y su trabajo, no sólo, es recibir al transportista, y ayudarle a maniobrar para entrar en el callejón que conduce a la "sala de cunas", por la nave, donde esperan las criaturas diseñadas también por él. Estas máquinas, inician su viaje a su lugar de laboreo, uniformadas en acero inoxidable. Material nada fácil de trabajar, y que encumbra a estos empresarios y obreros especializados en aportar vida mecánica, a ideas ilusionadas, quien sabe si soñadas o  en duermevela de los miembros de esta familia.


Si hay una sensación con la que parto de sus instalaciones, es el de haber conocido una empresa, donde la sencillez y la humildad ante loas diversas por su esmerado trabajo, no les hace levantar los pies del suelo. Todo lo contrario, un simple gracias acompañado por una sonrisa, son las respuestas que recibe el visitante, para  proseguir con su trabajo. A partir de este momento, cada vez que me acerque a una Cooperativa o fábrica de aceituna en conserva, podré presumir de conocer a los artífices de esta maquinaria;  al contemplar el brillo del acero inoxidable que visten y lucen las máquinas que llevan la pegatina inconfundible de Martínez Hermanos...

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