domingo, 6 de marzo de 2016

147) EL COLGADIZO, ¡ ÉSE LUGAR...!

  En los Evangelios que adoctrinan a los Católicos, se narra que el Diablo para tentar a Jesús, le ofrecía en propiedad unos territorios que divisaban desde los alto de una cúpula. Quizás sea por ello, que el ser humano  busca completar una ascensión para coronar un altozano desde donde, sin ser Mesías, ni Rey, sentirse por breve espacio tiempo como dueño y señor de las vistas que se contemplan desde la cima.
VISTA DE LAS HURDES DESDE EL ALTO DE El COLGADIZO
Por lo que puedo escribir que Extremadura ofrece al viajero, sea turista o deportista, unos promontorios naturales ideales para sentirse tentado de conquistarlos y sentirse un priveligado por poder contemplar unos dominios paisajistos que incitan al recién llegado a permanecer por un breve espacio tiempo que le permita disfrutar de la naturaleza en todo su esplendor.
 Uno de estos lugares se haya enclavado en el entorno de La Pesga(Cáceres). Se trata de una lugar al que se puede ascender por un recorrido que discurre por carretera comarcal y pista o camino con un perfecto piso. Desde La Pesga, se puede acceder a El Colgadizo en bicicleta, todoterreno, moto o quad. Y si el turista lo desea, puede realizar la ruta a pie, pues el camino permite disfrutar de una ruta tranquila en perfectas condiciones de seguridad.
TORRE DE VIGILANCIA CONTRA INCENDIOS, SITA
EN EL COLGADIZO.
  La distancia que separa la torre de vigilancia que preside este altozano del centro urbano de La Pesga llega a los 11km de ascensión continuada, cuya pendiente permite a quien se atreva a realizarla descansar del pedaleo en algunas zonas donde la pista es llana, dejando para los últimos 4km el esfuerzo más significativo donde el zizageo de la rueda delantera se hace imprescindible para poder completar la ascensión sin llevar el pie a tierra; al igual que levantarse del sillín imposibilita el agarre de la rueda trasera.
 La mañana se presentaba fría, quizás tenga que ver que los vientos del Norte arrastren las gélidas temperaturas a las que se llegan en Sierra de Francia salmantina, cuyas cumbres nevadas se pueden contemplar desde  donde las antenas de telefonía móvil cercanas a la caseta de vigilancia antiincendios de El Colgadizo aportan la cobertura necesaria para que estas líneas escritas después de cubrir esta maravillosa ruta en Btt lleguen hasta donde usted se encuentre, estimado lector.
VISTA DE LA PESGA(CÁCERES) DESDE EL COLGADIZO.
 Es tal la serenidad que se alcanza en este lugar, que aún siendo una mañana ventosa, el visitante puede disfrutar de los sonidos que Eolo, cual ventrílocuo, provoca al toparse en su camino con árboles, torres de alta tensión, así como de los orificios del casco ciclista.
 Un vez completada la ascensión, el ciclista, paseante, motero o conductor puede permitirse unos minutos desde donde podrá disfrutar de unas vistas tan especiales, que podrá ver como el recule del Pantano Gabriel y Galán, así como el discurrir  de los ríos que depositan en el lugar  sus corrientes, conforman el perfecto espejo para los rayos del Sol, cuyo reflejo desde la cumbre de El Colgadizo, acrecienta el sentimiento de sentirse afortunado para el turista, por encontrarse allí arriba en ese, su momento. Al igual que se tienen que sentir las abejas, cuyas colmenas sabiamente localizadas por el maestro colmenero, despegan y aterrizan de sus factorías construídas en madera, para culminar un proceso que aporta al humano, ese preciado fruto de la naturaleza, como lo es la miel, esa gran aliada para combatir el resfriado que bien le puede acechar en la cumbre de El Colgadizo extremeño, tras el continuado esfuerzo de la ascensión.
QUIZÁS EN ESTA FOTOGRAFÍA ENTIENDA POR QUÉ
LA MIEL EXTREMEÑA GOZE DE TANTA FAMA INTERNACIONAL.
 Por lo que es perceptible, que cuando usted decida hacer cumbre, disponga de ropa de abrigo para no quedarse frío, mientras usted permanezca en el lugar o decida disfrutar del descenso, el cual, en bicicleta, no tiene parangón para elevar los niveles de producción de adrelanina, al sortear curvas y evitar el despeño barranco abajo, donde los innumerables regatos amenizan con sus corrientes al turista, quien dispone del mejor hilo musical, que junto con el cantar de las distintas aves que pululan por la tierra de Hernan Cortes, conquistan al viajero, haciéndole sentir extremeño por el resto de sus días...¡Se lo digo por experiencia..! Visite Extremadura, no le defraudará.

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